domingo, 20 de abril de 2008

Un suspiro largo

Hace tiempo dije ya,
que te escribiría una canción,
sí, esas mismas, las cursis,
las que hablan de amor.

Todo comenzó con un cruce de miradas,
bajaste del cielo,
aunque tú no creas
en esas huevadas.

Si, así todo empezó,
como jugando,
no me había dado cuenta,
que ya te había encontrado.

Y de tantos te amo,
y de tantos te extraño,
lo dejamos ahí,
¿para no hacernos más daño?.

Más tarde después,
te seguí buscando,
aunque en el fondo sabía
que era en vano.

Aún recuerdo mis sábados solitarios,
donde cada lágrima,
era para tí, era por tí,
un suspiro largo…

Y tanto llorar y tanto sufrir,
y tanto caer y tanto herir,
para darme cuenta al fin,
de que todo el tiempo estuviste ahí.

Y ahora aquí, parada frente a ti,
lo tengo que admitir,
sí, es cierto,
siempre te he amado.

No quiero decir más,
sólo echarme en tus brazos
y pensar que nada ha pasado,
que nada ha cambiado.

No se si podré,
pero ya te encontré,
mi otra mitad,
mi complemento vital.

No hay comentarios: